El concepto de «costo de oportunidad en los negocios» – a veces llamado también «perdida de una oportunidad» es uno de los más importantes en economía y contabilidad. Después de hacer las decisiones de compra puede ser una buena cosa, sólo te haces esta pregunta, por lo que acabas de pagar (de alguna manera)?
Cuando uno se detiene a pensar en las cosas que compra, se comienza a dar cuenta de este concepto puede ser aplicado en una multitud de formas en el curso de la vida cotidiana y pueden desempeñar un papel muy importante para ayudar a organizar la vida, ya que se trata de las prioridades y lograr más en el día, especialmente si quieres acumular riqueza.
Básicamente, cuando se tiene que elegir entre dos cursos de acción y elegir una de las acciones, el beneficio que se obtendría sobre otra acción puede ser considerada como el «costo de oportunidad»
Supongamos que tienes una opción oportunidad en los negocios entre comprar un auto nuevo y pagar una operación que podría salvar tu vida. Si eliges la operación luego el «costo de oportunidad» no es el coche que querías comprar. Por otro lado, si decides comprar el vehículo y abandonar la operación, el resultando es tu muerte y luego el «costo de oportunidad» es tu vida.
Dado un paso más ahora: si periódicamente se aplican este tipo de pensamiento antes de hacer una compra, inversión o tomar medidas de algún tipo antes de gastar dinero, podrías cambiar tu vida por completo con lo que «acaba de ser pagado”.
Pensemos por un momento todas esas acciones pasadas que te lamentas ahora – los zapatos nuevos, realmente lo necesitabas. Si, lo que te estoy sugiriendo, se aplica al principio de «costo de oportunidad» cada vez que posiblemente hubieras tomado una decisión diferente.
El costo de oportunidad es un concepto económico que permite hacer referencia al valor de la mejor opción o la que no se hace a costa de la inversión de los recursos disponibles a costa de las inversiones alternativas disponibles.
Es decir que el costo de oportunidad asociado a lo que es un económico exime de tiempo para tomar una decisión. El costo de oportunidad es también el costo de la inversión no se realiza (calculado, por ejemplo, sobre la base de la rentabilidad esperada de los fondos invertidos).
Para que una inversión financiera tenga lógica, tu ingreso debe ser por lo menos igual al costo de oportunidad. De lo contrario, sería lo que perderíamos al descartar que lo que se obtendría por la inversión realizada.
El costo de oportunidad se puede estimar a partir de la rentabilidad que tendría una inversión y teniendo en cuenta el riesgo aceptado. Este tipo de cálculo permite contrastar el riesgo de varias posibles inversiones.
La macroeconomía considera el costo de oportunidad sólo puede establecerse a partir de los factores externos de la inversión.
Ejemplo de costo de oportunidad en los negocios: un hombre está dispuesto a invertir sus ahorros. El banco ofrece una tasa de interés del 15% para que una aplicación se ejecute, mientras que otra institución financiera sugiere que invierta en bonos (títulos de deuda) que se beneficiarán con el interés del 12%. Una persona decide invertir su dinero en una aplicación que se ejecute, el costo de oportunidad, por lo tanto, es equivalente al 12% de los ingresos que habrían hecho las obligaciones.